UROLOGÍA Y ANDROLOGÍA
«La salud no lo es todo pero sin ella, todo lo demás es nada».
Schopenhauer
«La salud no lo es todo pero sin ella, todo lo demás es nada».
Schopenhauer
En Grupo Creu Blava contamos con un servicio especializado en urología y andrología, dedicado a la prevención, diagnóstico y tratamiento de enfermedades del aparato urinario, riñones y sistema reproductor masculino. Nuestro equipo de especialistas combina experiencia clínica y tecnología avanzada para ofrecer una atención profesional, cercana y personalizada.
Atendemos patologías como infecciones urinarias, cálculos renales, problemas de próstata, disfunción eréctil, infertilidad masculina, alteraciones hormonales y enfermedades del tracto urinario inferior y superior. Cada paciente recibe un plan de tratamiento adaptado a sus necesidades, que puede incluir desde terapias médicas hasta procedimientos quirúrgicos mínimamente invasivos.
Nuestro enfoque multidisciplinar permite integrar urología y andrología con otras especialidades médicas como endocrinología, medicina interna y fisioterapia, asegurando un cuidado integral del paciente. Además, utilizamos técnicas diagnósticas avanzadas como ecografía, analíticas, urodinamia y estudios de fertilidad, garantizando diagnósticos precisos y eficaces.
En Grupo Creu Blava priorizamos la prevención y educación del paciente, proporcionando información sobre hábitos de vida saludables, control del peso, alimentación y ejercicio, que contribuyan a la salud urinaria y sexual masculina.
Es recomendable que los hombres se realicen un chequeo urológico anual a partir de los 50 años si no existen antecedentes de tumores urinarios o de próstata en la familia, o bien a partir de los 40 de existir estos antecedentes. Esta revisión permitirá detectar en estadios poco avanzados problemas urológicos potencialmente graves como los tumores de próstata, vejiga o testículo, y otras patologías como la hiperplasia benigna de próstata o la disfunción eréctil.
Aunque una revisión anual es lo más recomendable, se deben tener en cuenta algunos síntomas de alerta que deben hacer que el hombre acuda antes al urólogo, como pueden ser la dificultad o las molestias para orinar, la presencia de sangre en la orina o el esperma, el dolor en los testículos o el periné y los trastornos de la erección o la eyaculación.
Existe todavía a día de hoy una cierta vergüenza al hecho de acudir a un especialista que se encarga de una parte tan íntima del varón, un tabú que las mujeres ya han vencido al ver claras las ventajas que conlleva para su salud la visita anual al ginecólogo.
Es preciso que los hombres acaben con su reticencia a realizarse un chequeo urológico y lo vean como una visita rutinaria a partir de una cierta edad que les puede aportar un beneficio para la salud y una mejor calidad de vida.