La Dermatología es una especialidad médico-quirúrgica que se ocupa del conocimiento de la piel humana y de las enfermedades que primitiva o secundariamente la afectan, así como de los métodos para la prevención de las mismas y para la preservación o la recuperación de la normalidad cutánea. La Dermatología incluye también la utilización de técnicas terapéuticas especiales, tales como las de tratamiento farmacológico tópico, la aplicación de determinados métodos de fisioterapia especialmente diseñados para la utilización dermatológica (crioterapia, fototerapia, radiaciones ionizantes de baja penetración, etc.) y, por supuesto, métodos quirúrgicos.
¿Qué pasa cuando alguien tiene problemas en las uñas, el pelo, la boca o los genitales?¿A qué médico voy? La respuesta a todo eso es al dermatólogo (a excepción de los dientes, que están en la boca pero tendríamos que ir al odontólogo o cirujano maxilofacial, según lo que nos pase).
Un dermatólogo también puede asesorar al paciente con respecto a temas estéticos para mejorar el aspecto de la piel, pelo y uñas. Para poder establecer diagnóstico y tratamiento a las enfermedades de la piel, los dermatólogos pueden hacer múltiples procedimientos diagnósticos y terapéuticos que incluyen desde una biopsia cutánea hasta otras técnicas más complejas como láser, fototerapia, radioterapia y cirugía.